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La creación de zonas libres y autónomas de desarrollo tienen una rentabilidad a corto plazo. Esta se manifiesta en la valorización de la tierra hasta en más de 8000%. Por increíble que suene, no es ficción. Es realidad comprobada.

Cuando una zona deviene libre con condiciones favorables a la inversión la tierra se valoriza rápidamente en 500%, 3000% o más. Luego estos valores continúan incrementándose.

Aquí algunos ejemplos:
San Isidro, en Republica Dominicana, al devenir zona libre vio sus tierras valorizarse en 2000%.

En Freeport, Bahamas, zona libre, la propiedad se valorizo en 8000%.

En Dubái, zona libre la propiedad se valorizo también en 8000%.

Shenzhen, en la China, al ser declarada zona libre tuvo un crecimiento anual de 34% durante los primeros quince años atrayendo millones de inmigrantes. Según los expertos el valor de la propiedad aumento en 8000% o más.

¿Esto qué significa?

Significa creación de valor inmediata obtenida de manera simple, rápida y eficiente.

En breve, el propietario de un terreno que vale $150 el metro cuadrado vera su valor aumentar hasta $12000 el metro cuadrado si la zona de dicha propiedad deviene económicamente libre. Y un terreno de $1000 el metro cuadrado valdrá en poco tiempo $80000 el metro cuadrado por el solo hecho de pertenecer a una zona libre.

Una hectárea valorizada en $15000 adquiriría un valor de $1200000.

Imaginemos la valorización de la tierra en la zona del proyecto Peru-Via, hoy el VRAE, de devenir esta una zona libre de desarrollo. En la cual podría existir Peruvia ciudad libre, una metrópoli como Nueva York.

Pero sobretodo maginemos los beneficios en educación, salud, desarrollo y prosperidad que dicha valorización traería consigo.

Felipe Tudela

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